BLOGENART ᴍᴀɢᴀᴢɪɴᴇ | Deslucido encierro de Fermín Bohórquez condiciona el cuarto festejo de abono

La entrega del valenciano Román y detalles de Curro Díaz, en una tarde marcada por la falta de raza y transmisión del ganado

Román corta una oreja en la cuarta corrida de abono ante toros de Fermín Bohórquez. Curro Díaz y Rubén Pinar se fueron de vacío en una tarde deslucida. — ARJONA / PAGÉS

Redacción BLOGENART Magazine

MARTES | 29 ABRIL 2025

Román corta una oreja en la cuarta corrida de abono ante toros de Fermín Bohórquez. Curro Díaz y Rubén Pinar se fueron de vacío en una tarde deslucida.

Román fue el único espada que logró cortar una oreja en el cuarto festejo de abono, gracias a una faena valiente y ligada al tercero de la tarde, al que supo exprimir pese a sus limitaciones. En su segundo, volvió a mostrarse dispuesto, incluso yéndose a portagayola, pero el toro no ofreció opciones para redondear el triunfo.

Los toros de Fermín Bohórquez, bien presentados pero faltos de raza y transmisión, condicionaron el desarrollo de la corrida. Curro Díaz dejó detalles de su clase, especialmente con el capote y al natural, pero sus oponentes impidieron mayores logros. Rubén Pinar, por su parte, mostró disposición y oficio, aunque tampoco encontró material propicio para el lucimiento.

Resumen del festejo

Román se erigió como el único triunfador del cuarto festejo de abono al cortar una oreja al tercero de la tarde, tras una faena marcada por su valor, entrega y firmeza. En contraste, Curro Díaz dejó destellos de su clase sin lograr redondear, y Rubén Pinar se marchó de vacío tras enfrentarse a un lote sin opciones claras.

La actuación de Curro Díaz

Curro Díaz dejó una gran impresión en su recibo capotero al primero de la tarde, toreando con temple y estética a la verónica. El toro, que inició con clase, acusó los dos puyazos y se vino a menos, lo que condicionó el desarrollo de la faena. A pesar de ello, el diestro de Linares logró pasajes de calidad con un animal cada vez más apagado, que incluso llegó a voltearlo sin consecuencias graves. La estocada, algo caída, fue efectiva.

En su segundo, Díaz apenas pudo lucirse con el capote. En la muleta, planteó la faena por el pitón izquierdo, logrando naturales de buen trazo a pesar de la escasa transmisión del astado. Su actitud en todo momento fue de firmeza y entrega.

Rubén Pinar, sin opciones claras

El primer toro del lote de Rubén Pinar mostró nobleza pero poca fuerza. El albaceteño supo entenderlo, templando sus embestidas y extrayendo algunos muletazos estimables, aunque carentes de emoción. Mató con acierto y fue ovacionado.

El quinto de la tarde, un toro de gran volumen, llegó sin celo a la muleta y resultó muy deslucido. Pinar lo intentó con insistencia, pero no logró levantar la faena. De nuevo, dejó una buena estocada como cierre.

Román, entrega y conexión con el público

Román ya había avisado de sus intenciones con un vistoso quite por gaoneras al segundo toro de la tarde. En el tercero, toreó con soltura a la verónica y brindó la faena al público. Inició con pases de largo y encadenó dos series por el derecho que lograron conectar y encender la música en la plaza. Aunque el toro no humilló por el pitón izquierdo, el valenciano volvió a la mano diestra y completó una faena de mérito, adornada con ajustadas bernardinas y rematada con una estocada efectiva que le valió la única oreja del festejo.

En el sexto, se fue a portagayola buscando redondear su triunfo. El toro, sin ritmo y defensivo en la muleta, complicó la labor. Aun así, Román logró algunos naturales meritorios, pero sin posibilidad de redondear ante un oponente peligroso y deslucido.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros: Sevilla. La Maestranza.

Ganadería: Se lidiaron seis toros de Fermín Bohórquez, bien presentados pero de escaso juego.

Curro Díaz: ovación y ovación.

Rubén Pinar: ovación y ovación.

Román: oreja y silencio.

Entrada: Un tercio del aforo.

Fotogalería Arjona / Pagés.